"Por ahí mal vamos"

  La educación siempre se ha considerado un privilegio que tan solo unos pocos podían adquirir; la mayoría adinerados y pertenecientes a clases sociales elevadas con la suficiente capacidad económica como para poder pagarla. Con el paso del tiempo, el derecho a la educación se ha ido extendiendo, con lo que toda persona con el deseo de aprender, podría hacerlo. Pero esos tiempos han quedado atrás, ya que poco a poco el derecho a aprender y a estudiar esta desapareciendo, hasta que a final la educación acabará volviéndose, otra vez, un privilegio que debe ser pagado. 

  

  Desde pequeños nos inculcan la idea de estudiar, la idea de que mediante el estudio y el esfuerzo uno puede conseguirlo todo, crear su propia vida y su independencia. Por ello, todos aquellos que desean crear un futuro en el que poder vivir sus propias vidas, luchan y trabajan por lograr aquello que un día soñaron. Tristemente, hoy en día, todo esto no es suficiente. 

  

  Hoy en día, la educación sufre recortes continuos que afectan directamente al alumnado. El gobierno respalda esta situación culpando directamente a la crisis, responsable de todos los recortes sanitarios, financieros, pero sobre todo educativos. Impone medios sumamente sutiles con los que poder reducir su demanda, exámenes con los que acceder a la Universidad, selectividad, exigencia mayor en las notas adquiridas por el alumno, disminuir el número de becas, reducir el presupuesto para la educación con lo que el número de profesores decrece y el numero de alumnado por aula asciende... en resumen, un recorte educacional en toda regla. 

  

  Todo esto no son mas que impedimentos para todo aquel que quiera estudiar, la mayoría de los alumnos a causa de la exigencia que se pide a la hora de entrar en ciertas carreras, así como en medicina o enfermería, o debido a la falta de dinero, pierden su derecho a estudiar, o bien son empujados a hacer carreras que ellos nunca desearon hacer. En cierto modo, con todos estos métodos, se prescinde de todo alumno con poca capacidad intelectual, y solo se ayuda a aquellos que la tengan mayor. 

  Son tiempos duros para los estudiantes, y peores son los que van a llegar; pero a pesar de ello, a pesar de todos los impedimentos que hagan que la educación sea algo casi imposible de hacer, nunca hay que darse por vencido, luchar y revindicar lo que a cada uno nos pertenece el la esencia de la vida, y la vida hay que ganársela.